El gasto del sector público en el periodo enero-febrero de este año fue mayor al aprobado por el Congreso, a causa de incrementos en el pago de tres gastos obligatorios: intereses por la deuda, transferencias a los estados y pago de adeudos que quedaron pendientes en 2017.
El gasto público fue mayor por 60,700 millones de pesos (mdp) a lo que aprobaron los diputados el año pasado, debido a que el gasto no programable (gastos obligatorios) fue superior en 78,400 mdp respecto a lo presupuestado, refiere el informe de febrero sobre Finanzas Públicas y Deuda Pública de la secretaría de Hacienda.
De acuerdo con el documento, el mayor incremento proviene de un pago adicional de 51,000 mdp por concepto de Adeudos de Ejercicios Fiscales Anteriores (Adefas), pagos pendientes que la administración dejó en 2017.
También se observó un mayor pago para los estados por concepto de participaciones. El monto fue 21,400 mdp más a lo presupuestado, debido a un aumento en la recaudación federal participable.
Además el costo por el pago de intereses de la deuda pública fue mayor por 6,000 millones de pesos.
El documento detalla que el gasto programable (destinado a los organismos públicos) disminuyó 17,700 mdp, en comparación con lo programado.
Según Hacienda, esta baja se relaciona con un menor gasto de Pemex por 10,900 mdp así como del IMSS e ISSSTE por 6,200 mdp, en comparación con lo aprobado en el presupuesto.
No obstante, la CFE tuvo un mayor gasto por 37,900 mdp, por mayores precios de combustibles para la generación de electricidad, lo que ayudó a compensar este menor gasto.
Vía Expansión